sábado, 29 de diciembre de 2012

jueves, 20 de diciembre de 2012

Las matemáticas son más fáciles que el amor.

   En las matemáticas todo tiene un porqué y una razón mas que lógica. Siempre es la misma formula, y si te equivocas puedes repasar y cambiar el signo negativo a positivo y el resultado será el acertado.

   En el amor todo es mucho más complicado que eso. No puedes cambiar nada por mucho que quieras. Esa persona de la que te enamoras y que ahora se conforma con un simple "seamos amigos" no puede volver a ser lo que era. Tienes que soportar ver como otras tontean con él mientras tú te mueres de celos todo el rato. Contemplar como las conversaciones, esas que duraban horas, ahora duran escasos segundos, un simple "ḧola, ¿qué tal?" seguido de un simple "perfecto".

  
    Ver como esos "para siempre, pequeña" tenían fecha de caducidad.
  
    Siempre he pensado que las matemáticas eran la cosa más complicada del mundo. Ahora puedo decir que no hay nada más complicado como el amor, donde el signo no se puede cambiar, porque el resultado siempre suele salir negativo.

martes, 20 de noviembre de 2012

Y ahora es cuando yo me pregunto si mereció la pena.

    Me paso noches enteras sin dormir, soportando como puedo las pesadillas que me acosan días tras día. Después de una noche en vela, me toca ir al instituto como si tal cosa y atender a las lecciones mientras lo que más quiero es dormir. Cuando llego a casa estoy tan derrotada que casi no me concentro para estudiar, pero aún así estudio, porque sé que es eso lo correcto. Ahora bien. ¿De verdad merece la pena? ¿De verdad merezco yo la pena?
    Sí, se podría decir que esto es una media reflexión sobre mí misma, aunque no lo he pretendido, por lo menos no al principio, surgió mientras escribía. El hecho de mis pesadillas es tan repetitivo que debería de aburrirme, pero no lo hacen. Es ese miedo a que me alejen de mis seres queridos, escasos pero importantes, lo que me tanto me aterra y se reflejan en ellas. Me da igual el cariz que tomen al principio, la conclusión es obvia: si me los quitan yo me quedo sola y perdida, sin saber qué hacer en el mundo. En ese momento justo es cuando me despierto chillando y mi madre viene a decirme que todo está bien, pero no lo está. Nada está bien. Nada.


    En fin, seguiré igual después de desahogarme, porque los promeblas siempre vuelven.




martes, 6 de noviembre de 2012

No llega, desaparece sin más.

    Querida vida:
  
    ¿Por qué eres tan injusta? ¿A caso hice algo malo? Si es que sí, entonces lo entenderé y afrontaré lo mejor que pueda, pero si es no... explícame por qué hago todo mal. Por qué todo en lo que creía fue destruido como un castillo de naipes. Corro intentando solucionar las cosas, pero en cuanto más empeño pongo, peor me salen las cosas. No tiene sentido. No. Escribo para desahogarme, pero incluso eso ha perdido ya su atractivo. No dejo de repetirme que todo cambiará el día menos pensado, pero estoy tan agotada que ni me lo creo ya. Es complicado, demasiado. Sigo sin encontrar la solución a esta complicadísima ecuación en la que se ha convertido mi vida diaria. Quizá es que simplemente, no la tenga, que la solución sea negativa, como todo. ¿Destino? Puede ser. Me da igual, porque la tenga o no, yo no voy a ser capaz de resolverla.

    Y no tener respuestas para todo lo que pienso es frustrante, más para mí que estoy acostumbrada a cuestionarme hasta el simple hecho de respirar. Y no, no lo soporto. No me acostumbro. Es tan difícil... Desaparece, sí. La mejor solución es esa: DESAPARECER. Dejarse caer hacia el oscuro pozo sin fondo en el cual casi no hay oxígeno y poco a poco la humedad te llena los pulmones hasta caer en la inconsciencia. Sí, justo eso. Eso es justo lo que quiero.

martes, 23 de octubre de 2012

    Cada momento de tu vida por mucho que quieras, queda tatuado en tu piel. Al principio el dolor no es dolor, es un simple picor molesto, pero agradable, dulce. Poco a poco empieza a convertirse en algo intenso. A quemar. Y con cada latido duele como un cadernal detrás de una herida.
    ¿Qué queda sino soportarlo lo mejor posible, entrando en un sopor donde las horas pasan deprisa y no entiendes el verdadero concepto del tiempo?
  
    Pero el tiempo pasar, pasa, quieras o no.

    Y cuando pasa, llega el maldito dolor de nuevo, más intenso que antes si es posible. Solo que algo falla, porque no te duele como por aquel entonces, es soportable, en cierta medida, agradable en caso extremo si eres masoquista. Pero ese no es el caso, no estamos aquí para comprobar el grado de dolor que eres capaz de sorportar, lo que quiero decir es, que a pesar de todo lo que has sufrido, de todo lo que has llorado, de las millones de noches en vela que has tenido que soportar después de su marchar... te vuelves fuerte de nuevo.



Incluso en los peores momentos, te levantas.


lunes, 22 de octubre de 2012

18, lo mejor de todo.


  Y yo te quiero así, tal cual. Con tus defectos y con tus cosas buenas.

lunes, 15 de octubre de 2012

A veces tragarse las lágrimas no es la mejor solución de todas.

    Ella está sentada en su cuarto, contemplando fijamente el atardecer. Una lágrima solitaria cae en la mesa. Rápidamente, ella se la quita con gesto impaciente. Intenta no llorar más mientras pestañea con muchísima rapidez para disipar las lágrimas, que amenazan con emerger de nuevo.
    Ahora mismo, no tiene mente para nada: solo para él. Él se fue, se niega a quererla. No le da otra oportunidad. Y ahora ella se limita a arrastrarse como un alma en pena. Y yo, pienso que se equivoca actuando así. Se lo he dicho, pero ella, como si oyese llover. Sé que en el fondo, sabe que podrá recobrarse, que tiene la fuerza y entereza necesaria para superarlo. Lo que pasa que ahora mismo no anda en su mejor momento. De nada va a servir todo lo que le digamos la gente que la queremos. Seguirá pensando cosas horribles y querrá morir.
    Odio la sensación de impotencia que me da verla así y no poderla consolar con las palabras adecuadas, ni darle una buena dosis de helado para que sonría un poco. Conformame con llamarla y saber si está bien me es tan simplemente poco... Pero la vida a veces se pasa de cruel, y separa a gente que debería de estar junta, más cuando esas personas lo están pasando mal.
     Es tan injusto...
     Pero tengo la esperanza de verla levantarse sonriendo, como hace casi siempre y que vuelva a ser la chica risueña, soñadora e imaginativa que conocí hace ya tiempo.



domingo, 14 de octubre de 2012

Ingravidez.

    Los pies en alto. Ese estremecimiénto en el estómago. Parece que vuelas, pero enrealidad estás más atado que nunca en la Tierra. ¿La razón? Esa persona que te hace especial de mil maneras distintas, pero casi sin darte tú cuenta. Flotas y el tiempo ya no es tiempo. Las leyes de la física no se aplican para ti. Simplemente no quieres que no acabe, que no llegue el momento en el que tienes que dejar atrás el cuento y enfrentarte a la realidad. Los minutos entonces no pasan deprisa, pasan lo más lento posible. La respiración se hace pesada y no tienes ganas de nada, solo tienes ganas de él.


    Los hay que no creen en el amor, yo era uno de ellos. Pensaba que te volvía estúpido, irracional. Que solo servía para hacerte débil. Que todo era erróneo, porque te hacía verlo todo sin objetividad. Me he dado cuenta de que la verdad es otra. No te hace débil, te hace fuerte. No te hace estúpido, no mucho. Y también te das cuenta de que serías prácticamente de todo por esa persona que también es culpa de alguna de tus lágrimas cuando os enfadáis. Pero no por eso puedes dejar de quererle.
    No estaba buscando encontrarte pero me topé contigo, debe de haber sido el destino.

viernes, 12 de octubre de 2012


 'Mis pesadillas suelen ser sobre  

perderte, así que se me pasa 

cuando me doy cuenta de que estás 

a mi lado.'



Peeta Mellark.
 

Y volver a sonreír otra vez.

    Te necesitaba, no sabes cuanto. Y has vuelto. Todavía no me lo creo, espero cada segundo que pasa con ansiedad, pensando que vas a volver a desaparecer. No lo haces; no lo hagas. Echaba de menos hablar contigo, sonreír como una idiota y poder escuchar nuestra música sin tener que llorar. Notar como el corazón vuelve a latir con fuerza después de una semana paralizado. Poder respirar completamente sin punzadas dolorosa. Sonreír. Sonreír hasta que me duela la mandíbula. Y desear besarte como nunca lo he echo.
     No puedo negar lo mucho que te quiero. Así por favor, no te vuelvas a ir.

miércoles, 10 de octubre de 2012

Las heridas que no se ven son las más profundas.

    Un cigarrilo tras otro. Como una locomotora. El humo alivia el dolor. Una calada sigue a otra. Aspira el dulce olor del humo, se lo traga y lo expulsa con la boca formando una 'O' casi perfecta. Es lo único perfecto de la estancia. Pasa la vista cansada por la sala; botellas de vodka, cigarrillos fumados hasta casi gastar el filtro, alguna que otra raya de cocaína esparcida por la mesita de centro del salón. El caos domina la sala. Un caos que ella misma creaba y que creía controlar.
    Pero, como todo, al final es el caos el que te controla a ti.
    Intentamos controlar nuestra vida sin casi darnos cuentas de que siempre suele ser al revés, ella todavía no lo sabe, se niega a aceptar que ha perdido el control. De nada le sirven las resacas después de las juergas. Ni los vómitos de tanto alcohol como bebe. El ardor en la garganta, producto de todo el alcohol expulsado no la ayuda a recapacitar sobre su vida. Al fin y al cabo ¿de qué sirve? La vida... La pintan tan bonita a veces... ¿Ahora es el momento de decir que pase lo que pase, sigue viviendo? Pues no, hoy no está para pensar en lo bonito de la vida. Justamente por eso se corre esas juergas. Ella no quiere vivir, solo perder el tiempo, hasta que llegue un día en el que todo acabe.

    Mientras tanto seguirá ahí, bebiendo, fumando y esnifando cocaína. Las únicas cosas que la hacen olvidar, verdaderamente, todo el dolor que siente.



miércoles, 3 de octubre de 2012

Podría contar mi vida uniendo casualidades.

   Me hallo aquí, escribiendo después de muchas semanas. No sé qué decir, casi he perdido la práctica. Pero me intentaré lanzar, por poco que salga.

   'Y hace ya un mes desde que empezó todo. El principio del cuento, como dicen algunos. Una historia que no se sabe si tendrá final feliz o no tendrá final. Me da igual, sinceramente. Lo que no me da igual es esa sensación de profunda ingravidez que me rodea cuando hablo contigo. Que el tiempo no funcione con los términos establecidos. Que sea capaz de recordar todo lo que hablamos, pero incapaz de recordar las respuesta de un examen. 
    Esa sensación de que mis pulmones cogen oxígeno completo sólo cuando tú estás presente. Bonito. Precioso. Romántico. Pero a la vez, desconocido. ¿Enamorada? Tal vez, no lo sé, creo que sí. No tengo claro muy bien el término, tampoco es que tenga mucha experiencia con estas cosas. Solo sé que te quiero y más de lo que pensé que se podría querer a alguien. No, no habla una tonta adolescente enamorada a la que se le pasará el atontamiento después de dos semanas de relación. No. Tampoco hablo por hablar, para llenar un blog con tonterías de enamorada. Hablo con razón y porque, sinceramente, siento esto demasiado intenso para mi gusto.
     No, no me quejo. De hecho, me gusta la sensación de poder estar feliz cuando todo lo dabas por perdido. Es simplemente que no sé muy bien como encajar este golpe así por las buenas. Amor. Esa palabra que abarca tanto para unos y tan poco para otros. 
     No quiero comerme mucho la cabeza, pero irremediablemente lo hago. La inseguridad parece la nueva orden del día.
     
     Y no sé qué pasará. No sé si esto tendrá un buen final, solo sé que pase lo que pase intentaré que no duela demasiado. Mientras tanto, intentaré vivir lo más intensamente que pueda. Sonreiré cuando sea necesario y lloraré cuando la situación lo requiera'.

 

domingo, 16 de septiembre de 2012

 
   -Buenos días, princesa ¿soñaste con lo más bonito del universo?
   +Todavía no he tenido ocasión de conocerlo.
   -¿No? Pues te diré un secreto, la cosa más bonita del mundo... eres tú.

sábado, 8 de septiembre de 2012

Darkness.


  Vuelve a ser de noche. La oscuridad es demasiado aplastante en estos momentos. Sinceramente... no sé qué esperar de esta noche. Dudo que haya algo especial. No va a venir mi hada madrina con un traje estupendo, listo para ponérmelo e ir al baile para luego tener que correr a las doce, dado que se me acaba el hechizo. Cansa. Cansa ir de princesita. De doña perfecta. Esperando al príncipe azul que te hará feliz y comer perdiz. En el fondo, aunque lo neguemos, todas esperamos al príncipe de sus sueños. Poder perder el zapato de cristal. Junto con todo lo demás. Y que él te lo devuelva con un beso incluido.
   
   Pero hoy... hoy no voy a dejar que otros escriban el cuento de mi vida. Yo, imprefecta. Yo, caprichosa. Yo, soñadora. Dejaré atrás todos los mitos y toda la fantasía por la cual sufrimos. Hoy, directamente, seré yo quien decida qué me va a pasar, con quién y cómo. Y si el destino intenta arrebatarme el cuaderno en el cual estoy escribiendo mi propia historia, se lo arrebataré con mucha satisfacción. Porque a lo que no estoy dispuesta ya, es de ver como otros deciden por mí.

    Y si me llevo más palos de los acostumbrado, será porque yo lo haya decido. Y a nadie más que a mí le tiene que importar.

viernes, 7 de septiembre de 2012

Little promise.

   Prométeme que no te vas a ir como un cometa. Que me vas a pintar sonrisas en los peores momentos. Que solo seré yo la dueña de tu corazón. Que todas y cada una de tus sonrisas sean mías. Tus labios... que solo prueben los míos. Que si tienes que ver a alguien al despertar, esa sea yo. Pequeñas promesas que espero que cumplas. Promesas que para mí quizá sean tan importantes como la vida misma. Bésame, sonríeme y no me dejes nunca. Dale la espalda a todo lo que no sea relacionado con nosotros. Olvídate de esas palabras huecas de los demás. Hoy nos toca a nosotros sonreír como nunca. Llorar como nunca. Besar como nunca. Dormir juntos como nunca. Nunca. Palabra que finaliza el "siempre". Pero para nosotros, no hay siempre. Sino un "felices y comieron perdices".

miércoles, 29 de agosto de 2012

-Hoy quiero tocar el cielo.
+¿Puedo acompañarte?
-Claro, ¿estarías dispuesto?
+Sí, pero... ¿qué tengo que hacer?
-Tendrás que montar en un avión a más de 3000 metros de altura, claro hay que estar tres meses entrenando en unas clases que cuestan 200€ al mes. Luego tendremos que pagarnos el equipamientos y el viaje en el hericóptero, después tendremos que tirarnos y bueno, con el posible riesgo de que pueda salir mal. ¿Estarías dispuesto a hacer eso por mí?
+Sí... estaría dispuesto a eso y más.
-¿Entonces quieres tocar el cielo conmigo?
+Claro ya te he dicho que...
-Pues bésame y ahorrémonos el dinero y el viaje.

lunes, 27 de agosto de 2012

L O V E.


+Eh... ¿Qué miras?
-Me estaba fijando en tus labios, son preciosos ¿sabes?
+Creo que serían más bonitos si estuvieran junto a los tuyos.

sábado, 25 de agosto de 2012

Contra las rocas.


    Se encontraba en el acantilado. Eran las tres de la tarde. No había mucha gente. Mejor. Así no habría muchos espectadores. No se encuentra muy dispuesta a hacerlo, pero sabe -o eso quiere creer- que no hay otra salida para que todo esté como antes. Está cansada de huir como una cobarde. De llorar por las noches sobre su almohada como una niña pequeña e indefensa. Justamente se trata de eso, no es una niña pequeña que no sepa defenderse. Eso creyó siempre; hasta que llegó él y le demostró lo contrario. Que era fuerte. Que podía llegar a conseguir cualquier cosa. Pero solo era un juego mientras esperaba otras cosas mejores. Ahora ya no estaba, pero ella sí. En el mismo sitio donde se conocieron, hace ya tanto. ¿Tanto? Diría que han sido un par de meses, pero le parecen más. Eso es lo más extraño o bonito -según se mire- del amor. Y es que los momentos parecen eternos, o tras veces se alargan y parecen no acabar.

    Un paso hacia delante. Llegando al borde. Fuerza un suspiro. Nunca llegó a pensar en que moriría así, destrozada y humillada. Para una vez que se deja llevar por los sentimientos... La vida parece un gran sarcasmo para ella. Otro paso más. Ahora los dedos de sus pies se agitan a merced del aire, cierra los ojos.

    No le ve llegar. Él la sujeta rápidamente, susurrándola al oído lo mucho que la quiere y que no haga esas cosas. Forcejean. Gritan. Se odian. Pero no pueden negar que se querían, así que él hace lo imposible para que no se vaya y le deje solo. Pero es tarde, debió de haberlo pensado antes de que ella le viera con otra chica, abrazados, al igual que ahora. Diferentes personas, un solo amor. Ella salta y le deja, se aleja de sus brazos, de sus te quiero's olvidados. Así es como se olvidó de todo. Y él llora. Se arrepiente. Grita de dolor. Pero sabe que es su culpa. No debería haberlo hecho, piensa. Pero las cosas de las que se arrepiente ya están hechas y pagadas.

    Si lo hubiera pensado antes no tendría que ver ahora el cuerpo desmedejado y roto de la mujer a la que amó tragado por el mar.

miércoles, 22 de agosto de 2012

     La vida es es un camino que debemos seguir siempre hacia adelante. Nunca debemos dar un paso atras, no debemos tener miedo, debemos afrontar los problemas con valor... cada vez que tropieces toma aliendo y ponte de pie, yo sé que los que caen aprenden, pero eso depente de ti, por que en ti esta la esperanza de este mundo, yo creo en ti y, confío en que harás las cosas bien, que apoyarás la cosas buenas y te alejarás de las cosas malas.
    Espero que seas fuerte para soportar todas las pruebas de esta vida, quiero que sepas que las heridas sanan y te hacen fuerte.
    Cada vez que te equivoques sé consciente de tus actos.


 Espero que seas de esas personas.

martes, 21 de agosto de 2012

Bailemos.

    En el jardín, como cualquier otro día.
 
    Salvo que este era diferente, como solo ellos dos sabían.
    Diferente en no pocas cosas, pero eran tan sútiles e inadvertidas que la gente que caminaba por la calle a esa hora de la tarde no se podría dar cuenta.
    Él se acerca a ella, la coge de la cintura y empiezan a bailar. Movimientos torpes, inexpertos. Con muecas de dolor cuando un pie aplastaba al otro. Sonrisas para excusar la torpeza. ¿Un amor de verano? El calor abrasador, el sol, incluso la gente que pasea con su ropa de playa no hace más que afirmarlo; pero para ellos es más. Mucho más que un simple amor de verano, donde te dejas llevar por los sentimientos y que cuando quieras despertar de esa febril sensación que tiene estar enamorado sea otoño de nuevo. Que el frío sustituya las tardes calurosas y divertidas. La reclusión que trae consigo un día de lluvia.

    Y siguen bailando, sin pararse a pensar. Sin importarles nada. Bailan y bailan. Giran. Pisan. Sonríen. Timidez entre los dos que se va evaporando como el agua después de mucho tiempo expuesta al sol. Y vuelven a girar. Y se chocan entre ellos. Él la sujeta para que no se tropiece y en ese torpe abrazo se besan. Dulce. Suave. Nuevo. Y se separan. Él la abraza, ella le corresponde. No vuelven a bailar. ¿Para qué? Hoy todo estaba dicho ya. Lo que ellos no creían es que fuera así. Era algo nuevo, y nada desagradable. 
    Qué pena que cuando esto se acabe, sea invierno de nuevo.

sábado, 18 de agosto de 2012

París.


    Lunes. Lunes frío. Lunes de amores perdidos. Lunes de resaca. Gente paseando por la fría calle del centro de París. Hay alguien que destaca sobre ellos. Ella intenta pasar desapercivida, pero no es posible. Su cara, refleja cansancio y tristeza. Algo increíble para alguien tan joven. La gente que la ve caminando se la queda mirando, extrañada. No es muy normal mostrar semejante expresión de desolación. ¿Qué sabrán ellos? ¿Cómo va a poder fingir normalidad, si no sabe controlar su vida? Ojalá, piensa ella con tristeza, pudiera darle la vuelta a todo. Dejarlo pasar, no darle importancia. Pero sabe mejor que toda esa gente que la mira caminar sola, que es imposible para ella. Cuando toma una decisión, por dura que sea, no hay nada que la haga cambiar de parecer.
     No, no era cobardía por lo desconocido. Por nuevas formas de vida. Por puntos de vista diferentes. Tampoco era inseguridad.
     Era desconfianza.
     No confía en nadie. Cree siempre en lo peor de las personas. Ojalá pudiera encontrar a alguien que merezca la pena y que le enseñe lo bonito de la amistad. Pero mientras tanto, caminará sola por esa calle de París. Como un Lunes cualquiera.

jueves, 16 de agosto de 2012

Volver a creer en tonterías.

    Hoy es mi día, definitivamente. Volví a creer esas palabras vacías de sentimiento, esas sonrisas y esos besos. No puedo ser más estúpida. Mi meta en la vida no está completa. No sé que le falta.
    Busco. Busco. Vuelvo a buscar. Nada, no hay nada que me de una idea clara de qué es lo que necesito para estar feliz. Vale, está bien, lo tengo claro.
Voy a dejarme llevar. Voy a creer en esas palabras que duelen. Voy a vivir todo intensamente, como si no lo hubiera vivido ya.
    Y cuando despierte, tendré la agradable sensación de que solo ha sido un sueño. Un amor de verano. Nada importante, o eso querer creer. Pero cuando pasen los años y mire la vista atrás, me dé cuenta de que sí fue importante.


miércoles, 8 de agosto de 2012

Camino frágil.

   Caminaba insegura por las calles que nunca pensó pisar. Sus pies solo deseaban echar a correr y salir de allí, lejos del miedo. 
Tropezaba, se caía y volvía a levantarse. Esa era su nueva filosofía.Ya no es, ni será la chica asustada de siempre, la que tenía miedo de los monstruos de debajo de la cama. Hoy por fin puede presumir de tener el control de su vida.
















Un gran consejo: recuerda siempre que eres unico…. Exactamente igual que todos los demás.

lunes, 6 de agosto de 2012

Las cosas siempre pueden cambiar.

    Incluso en las vidas más oscuras, siempre hay un arcoiris.

    Él estaba solo, tumbado en la cama de su oscuro cuarto. Aunque no lo quiera reconocer, había estado llorando. Todo le sale mal, todo. Se esfuerza en ser el mejor y por una broma cruel del Destino, siempre pasa algo que lo tuerce de la forma más horripilante que pueda imaginar. No se explica qué ha podido hacer él para sufrir así. Simplemente tiene 15 años recién cumplidos, no ha vivido nada, ni un tercio de la vida que le queda y ya está sufriendo. Se pasea por la habitación, pegando golpes a la pared. Mira sus manos ensangrentadas, pestañea entre un mar de lágrimas y sudor. Maldice por lo bajo. Está más que harto de todo. Va al baño y empieza a buscar con demasiada insistencia. Finalmente encuentra lo que ha estado buscando todo ese rato; una cuchilla. Vuelve sobre sus pasos a su habitación. Piensa que sabe lo que hace. En realidad es todo lo contrario. Fugazmente mira por la ventana. Parece hecho justo para él, quizá sea así. ¿Quién sabe? Y tira la cuchilla a un lado, sale a la calle, bajo la lluvia. Se empapa enseguida, pero le da igual. No puede dejar de mirar hacia arriba, y sonríe como no ha sonreído en siglos. O eso le parece. La lluvia se lleva el restro de las lágrimas y el sudor al alzar el rostro hacia el cielo, donde se encuentra un arcoiris, iluminando el mal día que hacia hace unos segundos.

 
    Es increíble lo rápido que cambian las cosas en pocos segundos. Hace un minutos exacto estabas planeando tu propia muerte y ahora... Ahora sabes que por muy putas que las puedas pasar, en fondo del túnel siempre habrá algo de luz que alivie el dolor de tus heridas.

sábado, 4 de agosto de 2012

Esta noches sonríes, por ti, por él, por todos.

   Ven, dile a todos que vas a caminar a la par que ellos. Que pocas cosas te pueden dejar atrás. Sonríe. Sonríe. Y luego llora. Las lágrimas pueden esperar, hoy simplemente... Sé feliz.
   Demuestra lo poco que te importa lo que digan. El qué dirán todo el rato. No, eso no importa hoy. Tienes que ser tú misma, ir a tu bola y reír porque te dé la gana, no porque te lo digan. Venga, hazlo, no es difícil. Y si lo es... Aprende a que no lo sea.
Esta noche no abrá monstrous esperando bajo la cama. Esta noche tú serás las que los asuste a todos, porque se darán cuenta de que ya no les tienes miedo. Verás como dejarán de perseguirte en tus sueños. Todas las noches apartir de hoy tendrás que disfrutar como nunca lo has podido hacer. Di la verdad, te está gustando enfrentarte a tus miedos. Se puede ver a mil metros de distancia, esa sonrisa que escondías antes bajo las sábanas o que se ahogaban por las lágrimas ya no están y es lo que te hace especial, aunque no lo sepas.



~Hoy toca enfrentarse a tus miedos.

viernes, 3 de agosto de 2012

Armamento especial para enamorados.

Desde luego que no confiaba en nadie después de todo.

Claro que tiene miedo a enamorarse después de todas las promesas rotas.
Normal que no quiera expresar sus sentimientos.
Lógico que haya creado un puente insalvable. Capas y capas que la ayudan a portegerse de las mariposas que siempre aparecen cuando él traspasa la puerta con su aspecto de chico malo y su sonrisa ladeada.

Aunque no lo pueda negar, lo intenta. No le gustó la experiencia de ver su corazón partido en trocitos de cristal, como si fuera un simple jueguete. Y notar el dolor desgarrador mientras le  ve con otras chicas.Como si el amor que decía sentir por ella, ese amor tan profundo. Nunca hubiera existido.

miércoles, 1 de agosto de 2012

¿Ganas de verte? Muchas. ¿Ganes de besarte? Aún más.


Aunque no estés.

    No pensaba escribir esto hasta hace mucho tiempo; nadie espera escribirlo hasta que llega, la verdad.
Quizá lo que no quería creer o pensar es que llegase tan deprisa y en un momento tan inorportuno. Pero no sé si sabrás que hoy hace 8 meses que nos dejaste. Como un enorme cometa que brilla durante millones de noches, con fuerza, imponente y de repente desaparece como si nunca hubiera estado en ese cielo azul. La pérdida no fue inesperada, todos decían que te quedaba poco tiempo, aunque ninguno hacía caso de los médicos. ¿Y si se equivocaban?
Desgraciadamente no lo hicieron y un 1 de Diciembre de 2012 a las 13:54 te fuiste tan de improviso como el cometa. Y pensar que hacía un día exáctamente había intentado convencer a mi madre para ir a verte y que ella no me dejó... Que te fuiste y hacía tres meses que yo no te abrazaba ni te daba un beso. Tres meses que hacía que no me gastabas alguna broma ni te "cagabas en los judíos" cuando te enfadabas.
     Ya no estarás ahí para celebrar juntos nuestros compleaños. El año que viene cumpliré 16 y al igual que los 15, te los perderás. Y así muchos más. No has visto tantas cosas que han pasado desde que  te fuiste...
Mientras escribo esto miro al cielo, donde creo que estás, sonriéndome y dándome valor para afrontar tantas cosas que han venido y las que están por llegar.
      E intentaré ir con una sonrisa a todas mis batallas.


Por ti.

martes, 31 de julio de 2012

Dices, dicen, comentan... ¿Cual es la verdad?

Dices que amas la lluvia.
Sin embargo usas un paraguas cada vez que se pone a llover.
Dices que amas el sol,
pero siempre buscas una sombra cuando brilla.
Que también amas el viento,
pero cierras las ventanas cuando éste sopla.
Por eso siento miedo cada vez que dices
que me amas.



   Siempre hay un momento en que el camino se bifurca, cada uno toma una dirección pensando que al final los caminos se volverán a unir. Desde tu camino ves a la otra persona cada vez más pequeña. No pasa nada, estamos hechos el uno para el otro, al final estará ella, pero al final solo ocurre una cosa, llega el puto invierno. 


   Y de repente te das cuenta que todo ha terminado. Ya no hay vuelta atrás, lo sientes, y justo entonces intentas recordar en qué momento comenzó todo y descubres que todo empezó antes de lo que pensabas... Mucho antes... y es ahí justo en ese momento cuando te das cuenta de que las cosas solo ocurren una vez, y por mucho que te esfuerces, ya nunca volverás a sentir lo mismo, ya nunca tendrás la sensación de estar a tres metros sobre el cielo.

miércoles, 25 de julio de 2012

¿Quién dijo que fuera fácil?



 Dicen que al mal tiempo buena cara, que después de la tormenta siempre llega la calma, pero que al fin y al cabo las cosas nunca cambian. Que todo lo que sube baja, pero que agua que pasa no mueve molinos. También dicen que todo el mundo merece una segunda oportunidad, pero que segundas partes nunca fueron buenas; que quien tiene boca se equivoca y que rectificar es de sabios. Que querer es poder y hace más quien quiere que quien puede, pero que quien todo lo quiere todo lo pierde, además que de donde no hay no se puede sacar. Que quien no arriesga no gana, que quien la sigue la consigue. Que no por mucho madrugar amanece más temprano, pero que a quien madruga Dios le ayuda. Que si te pica te rascas, que todo lo que escuece cura. Que no hay mas ciego que el que no quiere ver, que a palabras necias oidos sordos pero que a buen entendedor pocas palabras bastan. Que la confianza da asco. Y que quien no corre vuela, que ya se sabe que las apariencias engañan y que por supuesto que no es oro todo lo que reluce. Y mira que quieres que te diga si quien avisa no es traidor, que si te he visto no me acuerdo, y que a rey muerto rey puesto. Que más vale solo que mal acompañado.

martes, 24 de julio de 2012

Una carta para el diablo.

    Buenas noches.

 
    Espero de corazón que hoy haya sido tu mejor día. Que te hayas follado a millones de chicas. Fumado un porrón de porros y bebido hasta caer inconsciente. Que sueñes con tus sueños de pacotilla. Que despiertes y no recuerdes nada. Que hayas roto todas las fotos. Que rías con desprecio al verme en tus recuerdos. Que pienses que eres el mejor en todo y que nadie te puede superar. Y seguir bebiendo, destruyéndote por dentro y por fuera, hasta quedar irreconocible. ¿De verdad quieres esto? 
    Recuerdo lo mucho que odiabas a las personas que hacías las cosas que haces ahora. Creyendo que eran débiles y que no tenían personalidad. ¿Qué ha cambiado para que tú lo hagas? ¿Dolor a caso? ¿Dolor de qué? Fuiste tú el que me dejó sola y sin nada que guardar, sola en el recuerdo y en la enfermedad. La que lucha cada día para salir como puede del fondo del pozo en la que la metiste. La que llora hasta quedar sin lágrimas. 

Eso no te importa ya.
    Ya no prometes amor eterno. Te dedicas a buscar chicas que te calienten la cama durante una noche como mucho. No quieres un compromiso permanente, te da miedo. Lo que no entiendo es por qué te da miedo, si el que daña como veneno eres tú. ¿Quizá lo que te miedo es enamorarte? No lo sé, aunque reconozco que contra más vueltas le doy, más embotada me siento. No entiendo por qué. Por qué. Por qué. Por qué. Esas dos palabras me retummban una y otra y otra vez. 
    Pero no las expreso, porque en el dolor, desde mi punto de vista, debes de sufrirlo solo sin que nadie se compadezca de lo mucho que sufres. 

    Y por favor, si algún día lees esta carta, espero que me llames y me des esas respuestas que necesito. 
FD:

                                                         Una chica con el corazón echo pedazos.
  

lunes, 23 de julio de 2012

Vienes de la nada. Me dices lo que debo de hacer y eso no es posible, yo soy libre y haré lo que quiera. 
En realidad quiero que me rompas los huesos de tan fuerte como me abrazas, que me digas lo bonita que estoy en cada momentos. Sentirme especial y única, cual princesa de cuento.

Correr, liberarse, gritar y llorar.

    No me voy a complicar.
    Cerraré los ojos y lloraré todo lo que tenga que llorar, sin dejar que todo esto me afecte. Caminaré con fuerza, como si todo me resbalara. Al fin y al cabo es una prueba más del destino o eso quiero creer.
    Mis pies, al caminar me piden ir más deprisa, hasta que me doy cuenta de que estoy corriendo como nunca lo he hecho y que sienta bien. El viento me da en la cara. Noto la libertad como nunca la he notado. Corre por cada partícula de mi cuerpo mientras todos los recuerdos pasan como un torrente de agua.
Parece que me muero, pero no es cierto. Solo es una vana ilusión para olvidar todo el dolor que me causa el asfalto que hay bajo mis pies.
     Llego millones de sitios en los que pasábamos la tarde, riéndonos, abrazados, de cualquier forma, da igual, simplente sabía cual era mi lugar en el mundo. Era feliz.
     Y de repente, como si estuviera sincronizado, empieza a llover. Lágrimas que reflejan las mías, se unen en en mi rostro, lágrimas de agua dulce. Eso es lo única que las diferencias de las que todas las noches suelto.
     Camino por la playa, oigo risas. Una pareja de enamorados que corretea mientras la lluvia les moja. Apartar la mirada y notar otro latigazo de dolor que viene acompañado de un maldito recuerdo. Duele. No sabes cuanto.


     Pero se acabó. Punto final, no voy a permitir dejarme llevar por la pena, por el dolor. Como tú quieres. Voy a olvidarte y si es necesario arrancarme la piel a tiras para olvidar las caricias, lo hago. Si tengo que correr hasta desgarrarme la piel de los pies desnudos que ahora corren de nuevo por la carretera, lo hago. El dolor físico es la mejor medicina para olvidarte, a ti y a los recuerdos. Me saltan cada vez que paro, las lágrimas me ciegan, pero no paro.
Intento perseguir... ni lo sé. Solo sé que tengo que correr, que eso es lo único que importa ahora.
     Y eso hago.
    Mírame, soy fuerte, puedo estar sin ti. Esa niña enamorada se ha quedado en la playa, mientras caminaba. Muerta.

     He aprendido muchas cosas con esto; Que amar es destruir, y ser amado es ser destruido.

miércoles, 18 de julio de 2012

Negativas.

    No hagas esto. No hagas lo otro. A nadie le importa lo que tú digas o hagas. ¿Enserio vas a ir así por la calle? ¿Qué dirá la gente? 
    
    Se acabó. No me voy a negar a hacer más cosas solo por miedo a lo que la gente diga o comente sobre mí. Raquel se cambia de cara para el mundo. Aunque luego en su cuarto llore y sufre como la que más. Será difícil, no lo niego, y también un poco claustofóbico. Hoy me he dado cuenta de que todas esas inseguridades no hacen más que fastidiarme la vida.
    Voy a ser feliz a mi manera y no a la manera que dicte la gente. No voy a seguir modas absurdas, ni tampoco sueños inútiles. 
Voy a vivir mi vida. No los sueños incompletos de los demás. Seré yo quien dicte las normas y el límite. La que haga las cosas mal y sufra las consecuencias. 
Seré quien siempre he querido ser, aunque me cueste al principio. Pero es mi reto, mi vida, mi pasión y nadie, ni si quiera tú, me lo puedes arrebatar.

    Así que ya sabes. No seas como cierta persona que conozco, que lleva más de la mitad de su vida pendiente de todo lo que la gente puede decir o hacer para fastidiarla, pero que hoy, cansada de todo, decide vivir su vida. 


El amor es para inocentes.

    Dejé hace mucho tiempo de creer en esas cosas, lo he dicho millones de veces; pero igualmente cada vez que él aparece por esa maldita puerta mis piernas se convierten al instante en mantequilla. Y al ser verano, las horas se me hace más largas si él está ahí riéndose como siempre. 
    Libre.
    Así me siento cuando el señorito está a mi lado. No me hace flata cerrar los ojos y evadirme a mi mundo privado, no. No es necesario si él está, porque, seamos sinceros por una vez en la vida, en ese mundo privado 2 de cada 1 de unas veces está en él. ¿Gracioso verdad? Para mí lo es, en cierto modo. El amor me hace débil, por mucho que la gente diga la contrario. Es una eterna tortura el no poder abrazarle cuando debe de ser, ni besarle. Hasta tocarle es difícil, porque los sentimientos no se corresponden.
     Es tan complicado todo... Tan siniestro algunas veces... 
     Pero ya no. No me voy a dejar llevar, voy a salir a la calle con miles de capas para ser inmune a tu encanto. Y volveré a ser esa chica que cree, con razón, que... 


El amor es para inocentes.

 

jueves, 12 de julio de 2012

Nubes.

    Todo el mundo sabe que las nubes son unas simples masas de cristales de nieve o gotas de agua microscópicas suspendidas en la atmósfera. Pero cuando yo era pequeña me gustaba echarme en la hierba y ver como cambiaban de forma. Cerrar los ojos e intentar adivinar una de esas figuras. Abrirlos y sonreír al no acertar. 
Eran figuras que me eran familiares, mis compañeras en las largas tardes de soledad. Recuerdo que cuando pasaban varios minutos sin conseguir ver ninguna forma definida allí arriba en el cielo, pronto me exasperaba. Las nubes eran mis compañeras, sé que suena un poco estúpido. Pero era mi forma de jugar por aquel tiempo
Ahora asomo la cabeza por la ventana y no puedo verlas como antes. Supongo que he perdido la capacidad de imaginar, por lo menos a como lo hacía hace tiempo. Ya no soy esa niña pequeña que jugaba, he crecido. No soy quien creía ser. La inocente niña... murió se mire por donde se mire. Incapaz de soportar las cosas malas de la vida
Pero aún así, busco algo bueno. Sonrío cuando la ocasión lo merece. Y sí, no paro de intentar imaginar otra vez las nubes con su forma. 
Fallo, nunca lo consigo.


Señal de que la infancia está más que perdida ya.

miércoles, 11 de julio de 2012

Notas la piel de gallina y su abrazo no está.

    ¿Has notado alguna vez unas ganas de dejar atrás todo lo que pensabas que formaba parte de tu vida? ¿De olvidarte de absolutamente de todo? ¿Pensaste de verdad en cumplir tu palabra? Demasiadas preguntas. Pocas respuestas. Todo desde que desapareciste, así, pluf, como si fuera todo un sueño.
    Ojalá fuera tan fácil olvidarte. Pero incluso mientras pienso en todo esto y trato de hacerlo, sé de sobra que no puedo. Es superior a mis fuerazs. Me siento débil.
    Y de repente... Todo esto, todo, es absorvido. Floto. No soy yo. No es el mundo. Parece el sitio donde van a parar las cosas que no tienen nada en la vida. Un sitio ideal para mí, que no tengo nada perder. Otro resplandor. Un recuerdo. Es verano, caminamos de la mano. Espera, espera. ¿Recuerdos? No. Para. No quiero recordar. Duele. Desgarra. No es agradable. AIRE. ¿Dónde está el aire? No puedo respirar me abruma la soledad.
¿Dónde estás? ¿Dónde te fuistes? Más preguntas. No, más no. No hay respuesta para todas. Intento salir como puedo. Se puede decir que chapoteo como una niña que está aprendiendo a nadar. Grito. Lloro. Pero aunque para mí sea la vida real no dejo de compararlo con los sueños. En un mundo estás, en el otro no.
En los dos hay preguntas. En los dos esas preguntas siguen sin respuestas.
¿De verdad hay tanta diferencia entre mis pasadillas y mi vida?


martes, 10 de julio de 2012

Palabras.

    Es una palabra. Las palabras son pálidas sombras de nombres olvidados. Los nombres tienen poder, y las palabras también. Las palabras pueden hacer prender el fuego en la mente de los hombres. Las palabras pueden arrancar lágrimas a los corazones más duros.
    Existen siete palabras que harán que una persona te ame. Existen diez palabras que minarán la más poderosa voluntad de un hombre. Pero una palabra no es más que representación de un fuego. Un nombre es el fuego en sí.

                                                
                     
                                                            El temor de un hombre sabio.




lunes, 9 de julio de 2012

Fuerte, más fuerte.

   Hoy es el día de echarte de menos. El día de los "te quiero" perdidos. No sé si tú estarás en igualdad de condiciones. Hay muchos por qué pero ninguno se responde. Voy al grano: Lo que necesito es que estés aquí, a mi lado. Que me abraces como siempre. Fuerte, más fuerte. Hazme sentir segura. Feliz. Improvisando como solo tú sabes.
Bésame. No un beso, ni dos. Millones de ellos. Déjame pensar en todos los momentos felices. Da igual si luego cuando te marches de nuevo, me duelan. Llegará un momento en el que todo acabará y volveremos a nuesta vida normal. Pero mientras tanto, por favor, no me dejes de abrazar. Fuerte. Más fuerte. Solo me siento completamente segura cuando tus brazos me rodean. Pero lo nuestro no es nada. Ceniza. Un montón de recuerdos quemados.




Y tenemos que aprender a vivir con ello.

-Cada vez que mire las estrellas...

+¿Te acordarás de mí?

-No. Me acordaré de millones de recuerdos. De lo mucho que te quiero. Y de que eres la estrella que me guía en una noche oscura. De eso me acordaré.



domingo, 8 de julio de 2012

Hojas de papel.

   Hola, soy yo de nuevo. Sola. En mi cuarto. Escribiendo, como casi siempre. La música sale del reproductor de mi ordenador. Las notas son suaves pero a la vez disonantes. Asiento, siguiendo el ritmo. Lanzo un suspiro y mira la ventana. Llueve. Lo normal en invierno, pero no por eso dejo de odiarlo. Lentamente me doy cuenta de que hay alguien mirándome fijamente desde la calle. Sé que es difícil distinguirlo con la lluvia, pero lo notaba en cada fibra de mi cuerpo. Fuerzo la vista y mi corazón se desboca. Él lo sabe antes que mi cerebro.
Está ahí. Bajo la lluvia. No lo pienso, simplemente actúo; abro la ventana. Sube rápido, veloz, mojado pero sonriente. Trae un paquete envuelto en papel de colores vivos.


    Se quita su cazadora de cuero, mi preferida y vamos a la cama abrazados.
La ventana, mientras tanto, sigue abierta. Al lado los papeles sobre los que me inclinaba antes. Mojados. Con la tinta borrada. Como los recuerdos que contenían

Mariposas.


  
 Pequeña mariposa. Vuelas por el campo apenas consciente de cómo pasa la vida. ¿Oyes a caso ese llanto? Un bebé hambriento es el causante. ¿Por qué lo hace? Su madre no tiene dinero para alimentarle. Poco te importa a ti, pero no pasa nada, son problemas ajenos, preocúpate de volar.
Igualmente no puedo dejar de pensar en esa mujer de andares nerviosos. Pasas volando sobre ella. Moratones disimulados por todo su cuerpo. No es difícil imaginar por qué. Sí, su marido la maltrata. Paliza sí, paliza también. Ella siempre intenta que todo esté perfecto para él. 
Siempre hay algo que falla.
Pero como ya he dicho antes, poco le importa a la mariposa. Ella solo vuela. 
Y sí, a ella le importará poco, pero a nosotros no. No entiendes por qué la gente se aferra tanto a la vida cuando ésta no hace más que darte palos y ser desagradable con quien no se lo merece.
Entonces es cuando llega esa frase que lo cambia todo, o, por lo menos, una parte de ese todo:

"Por muchos palos que te de la vida, lo bonito es levantarse y afrontarlos. No rendirse sin luchar"

Y poco a poco el bebé dejará de llorar de hambre, la mujer maltratada será feliz cuando se divorcie de su marido y millones de ejemplos que no caben en una simple entrada.

Eso es lo bonito de la vida, aunque la mariposa no lo sepa

martes, 3 de julio de 2012

Quiero estar despierta y dejar de soñar.

  Estoy más que perdida en una lucha sin nombre, sin fundamento, sin sentido. Es una lucha constante entre lo que no quiero sentir y lo que me obligas a hacer. Tengo que comportarme de forma fría, distante, mirándote a escondidas para que no sepas que sigo enamorada. Para que dejes de perseguirme con esos ojos azules tan brillantes, para que no cojas por la espalda y me abraces. 
Tumblr_m5ifnhaeo91qeuvkgo1_500_largeEn fin, lo que se supone que se hace cuando estás con la chica de tu sueños, ¿no? 
Pero es en ese punto donde dejamos las coincidencias, no puedo perdonar las cosas que haces, ni justificarlas. No tiene sentido. 
Dejaré de escuchar canciones de amor, de escribir gilipolleces, de dejarme llevar por los besos, las caricias, los momentos. De sonreír cada vez que gastas una broma. De buscar inocentes escusas para mirarte.

Me quedaré sentada mientras veo como te alejas, mientras el día, la noche pasan. Sola. Perdida. Mirando al vacío, quizá eso sea lo mejor. Y ahora mírame a los ojos, sí, a los ojos y niégame que no tenga razón. Solo entonces quizá me piense mejor las cosas y te deje llegar hasta el corazón que perdiste. 
Solo entonces.

domingo, 1 de julio de 2012

Lucha, no pierdas. Sonríe, no sientas.

  Toca empezar de cero. Subirse a lo más alto de la torre norte, si es que la hay, y gritar. Gritar hasta que notes la garganta dolorida. Hasta ver como poco a poco dejas de poder articular ningún sonido. No importa si al día siguiente estás ronco. Al fin y al cabo ¿Qué importa? Nada. No importa nada.                                        
Aprenderás a vivir con las apariencias. A fingir que todo es indiferente a tu persona. Creerás que es lo mejor. Lucharás de forma independiente con los problemas que te dará la vida. Fingirás sonrisas y llorarás a escondidas.

 Y un día volverás a sentir ese sentimiento que tanto has aprendido a odiar a base de palos. Tendrás miedo. No confiarás en esa persona. Es ahí donde te vas a enfrentar al fin a los problemas, subirás a la maldita torre norte y grita. Como nunca antes. Más que las otras veces. Llora. Patalea. Sueltalo todo. No dejes nada. Y cuando cabes, bajas. Sonríes y déjate llevar como nunca lo has hecho hasta ahora.

sábado, 30 de junio de 2012

Y si.

    Puede que sea verdad, que cada persona tiene su media naranja. Pero y si la pierdes por cualquier cosa. Y si esa persona se enamora antes de otra. Y si, y si. Son dos palabras que a la gente le da miedo lo que pueda venir después pero lo dicen siempre. Dos palabras que después de ellas no pueden venir nada bueno.

La nada.

   Es un lugar atractivo para unos pero desagradable para otros. Es fácil ir a ese sitio, solo tienes que dejarte llevar, cerrar los ojos y desear estar allí. ¿Funciona? Si funciona, estás muerto si no es que tienes algo por lo que vivir. ¿Por qué luchas tú? La eterna pregunta ¿Verdad? ¿No sería interesante ver por qué lucha cada persona? ¿Cuales son sus sueños, miedos y ambiciones? Nadie lucha por una misma causa, otros la pueden compartir. Pero siempre, siempre hay variaciones.
Repito: ¿Por qué causa luchas tú? ¿Dejas que te lleva la nada? 

viernes, 29 de junio de 2012

Todos los días de mi vida.

Voy a morderte los labios a cada milésima de segundo. A clavarte mis pupilas como si fueran chinchetas. Te demostraré lo mucho que te quiero y lo que me importas. Mandaré a mis labios de excursión por tus orejas susurrando palabras sin sonido. Para el reloj. Me importa una mierda la hora que sea. Si es de día o de noche a nosotros no nos afecta. Lo único que importa somos tú y yo. Súbete conmigo a esa montaña rusa donde el ritmo marca los latidos de mi pecho. Donde tú y yo lo único que tenemos que hacer es dejarnos llevar. Donde voy a quererte hasta la última letra de tu nombre. Porque eso es que me apetece hacer hoy, y todos los días de mi vida.

martes, 26 de junio de 2012

Recuerdos encerrados en una simple caja de madera.


   Cinco de Abril. Carla se inclina de nuevo sobre una caja que contiene todo en lo que ella creía. 

Tan solo una palabra.

AMOR.

Algo que últimamente todo el mundo se tomaba a la ligera. Una lágrima cae en una foto. Carlo no parecía ella, tenía esa sonrisa de adolescente enamorada colmada por dos brillos en los ojos que ya no estaba. ¿Qué pasó? Que ahí estaba enamorada. 
Respira hondo con brusquedad mientras pasa las fotografías con fingida indiferencia, mientras las preguntas la embotaban.
¿A todo esto llegaban los besos, las promesas? ¿Miradas cómplices, gestos? ¿Dónde estaba ese gran amor prometido?

Ella lo sabía.

Se fue a la mierda, como todo.

Pasa de foto. Otro latigazo de dolor. Otra lágrima.
Demasiadas ya.
Alza la cabeza para mirar el reloj y vuelve a suspirar. Las doce, seis de Abril, el fatal día ha pasado. Aunque los recuerdos siguen ahí, en esa caja con aspecto de inocente que la hace sufrir día tras día, año tras año. 
Se siente estúpida por no haber sabido como retenerle. Pero no lo es, el estúpido siempre será él por todo lo que le hizo pasar.
Lo que pasa que ella eso no lo ve. Solo mira sus defectos.

Esperemos que algún día vea lo maravillosa que es y que las lágrimas por ese chico bien poco son merecidas



lunes, 25 de junio de 2012

Descenso al infierno.

   Dicen que caminar sobre cristales es fácil si sabes controlarte. Que puedes controlar muchas cosas solo con el poder de la mente. 
Bien, son cosas que dicen. Otra cosa son los hechos.
Pensaba que podía controlar todos y cada uno de mis movimientos cuando él venía a verme. Pensé en múltiples ocasiones que podría controlar mis ganas de besarle, abrazarle. Ganas de todo.

   Pero o yo soy muy tonta o el control con él es imposible. Porque cada vez que se acerca a mí sonriendo con esa sonrisa travisa prefiero morir en el infierno, saltarme las normas y vivir en pecado. Solo por él.
Hay otra cosa que dicen sobre el infierno. Y es que el séptimo círculo es frío. Por lo tanto, el infierno está congelado, no envuelto en llamar. Me da igual. Absolutamente igual. Sé que cumpliré mi penitencia al estar terriblemente enamorada de él. Es mi perdión, lo tengo más que asumido. Pero no por eso dejaré de lado mis consecuencias.
Tengo que aprender a vivir con ello.

   Descendiste desde el cielo para hacerme entrar hasta lo más hondo del infierno. No lo niego, así es la vida. Cuando menos te lo esperas te encuentras atrapado enfrente de lo que creías que era amor verdadero y que ahora no son más que simples recuerdos. Deberíamos aprender a no confiar plenamente en el amor. Es traicionero, malvado. Pero amor al fin y al cabo. Sin él no podríamos ser como somos. No seríamos nada.
Lo necesitammos aunque no lo parezca.

   Y como quiero hacer justicia a esta entrada, debido al título. Diré que para mí el infierno ya está aquí. Solo con no poder verle, mirarle, besarle y demás
En fin, enamoramientos de adolescentes, supongo. Lo que pasa que en muchos casos esa escusa muy pobre. En algunos casos