viernes, 16 de diciembre de 2011

Sonrisas.


Desde un punto de vista fisiológico, una sonrisa es una expresión facial formada al flexionar los 17 músculos cerca de los extremos de la boca, pero también alrededor de los ojos. En los humanos, es una expresión común que refleja placer o entretenimiento, pero también puede ser una expresión involuntaria de ansiedad o de muchas otras emociones (ira, ironía, etc.). Varios estudios han demostrado que la sonrisa es una reacción normal a ciertos estímulos y ocurre independientemente de cuál sea la cultura, y tampoco es una reacción que uno aprenda, sino que se nace con ella: los niños que nacen ciegos sonríen desde un principio.



Pero es más, es mucho más, una sonrisa es muy dificil de conseguir, más en este mundo de locos.
Porque hay muchas personas que casi no sonrien, porque su día a día es muy difícil, y hay otras, que sonríen por doquier, solo porque todo les salen bien.
Lo que más rabia me suele dar, que esas personas que ríen, que se sienten felices, son personas que casi nunca cumplen las normas, siempre están haciendo "cosas malas" como diría un niño pequeño.
Y las personas que de verdad deverían de ser felicies, esas personas... son las que más sufren ¿el por qué? Fácil. La vida es injusta y por más que intentas ser feliz, no pueden conseguirlo casi nunca.

Por eso digo, y pienso que la vida es injusta con quien no se lo merece, y cada día me lo demuestran todas las cosas que pasan a mi alrededor.
Y eso, no es motivo de felicidad.

domingo, 4 de diciembre de 2011

1 de Diciembre.

 Estar en clase tan tranquila y notar un mal presentimiento, y justo en ese momento llega la conserje diciendo que me buscan mis padres. ¿El por qué? Que una persona a la que quería muchísimo se había ido a hacer un viaje... del que nunca podrá regresar.
 Como me sentí en ese momento, todo lo que pensé... fue que no era justo, que la vida no hacía más que ponerme pruebas, que nada de esto podía estar pasando, mucho menos a mí. Pero cuando bajé y vi la cara de mis padres... me derrumbé.
 Mi abuelo, mi compañero de cumple, el que siempre me hacia bromas... ya no estaba, sentí un vacío muy raro en el pecho. Lo único que también sé es que no podía parar de llorar, y caí en un mundo lleno de espirales del que no podía salir.
 Y me puse a recordar cosas, como por ejemplo cuando yo tenía unos seis años y mi abuelo estaba bebiendo vino, yo no sabía mucho de esas cosas, pero pregunté que si era Coca-Cola y él me dijo que sí; entonces yo bebí y lo escupí corriendo, porque el vino estaba malo no, lo siguiente.
 También recordé todos mis cumpleaños, por lo menos desde que tengo memoria, él siempre me llamaba a las 7 de la mañana porque los dos somos muy madrugadores, nuestros cumpleaños juntos, con la tarta con nuestra foto juntos... y eso ya nada, no podremos celebrarlos más, y eso me duele mucho.
 Y eso me hizo llorar más y más, pero por un lado tengo la esperanza de que donde quiera que estés me estés cuidando, y apoyándome. Que sé que sabes que yo siempre te he querido mucho, y que espero con ilusión el momento en el que los dos nos encontremos.
Te quiero muchísimo.

martes, 29 de noviembre de 2011

Lágrimas.

 Cada vez que lo oigo, o que lo veo, cualquier cosa que pase a mi alrededor que escape a mi perfecto autocontrol me desquicia, y me hace sentir impotente ante todo lo que pasa. No puedo más con ese sentimiento tan malo que me atormenta, ver como la persona que más quieres en este mundo muere a cada instante, ver como pierde la vida poco a poco... es triste y muy difícil de asumir.
 Mis sentimientos son confusos, porque por un lado sé que es ley de vida y que hay que morir, pero por otra no puedo, ni quiero asumirlo.
 Para colmo no hago más que sacar malas notas, no hago más que suspender y es un asco, porque estudio, estudio y estudio y nada, ¿para que estudio si suspendo? Mi vida es un asco, nada más que eso.
 Y por más que miro la vida con positividad cada vez se me hace más difícil conseguirlo, porque cada nuevo reto, cada nueva esperanza, se va a la mierda, más claro no puede ser.
 Al final esto acabará mal, y espero que sea pronto, tanta mala suerte no es buena para la gente.

jueves, 17 de noviembre de 2011

Implacable.

Así es como me siento cada vez que siento que todo se desmorona a mi alrededor, nada es como parece ser, es más todo lo que sale mal sale mal.
He pensado, muchas veces que quizá la suerte no esté de mi parte, que algo está mal en mí... lo sigo pensando, sé que es una tontería pero me cuesta cambiar mi forma de pensar porque estoy aconstrumbrada a que me traten como una idiota, y yo ¡joder, no lo soy! muchas veces cuando me tratan como tal me entran ganas de correr, correr, correr, correr y gritar muy muy fuerte para soltar todo.
Otras... son ganas de llorar, llorar y llorar hasta quedarte seca sin fuerzas y con una sensación de tranquilidad después de llorar que te cambia tu forma de ver el mundo, yo hago mucho eso, lo de llorar para mí no es un signo de debilidad al revés, es ser fuerte.

domingo, 6 de noviembre de 2011

Inseguridades.

 ¿Quién no las ha tenido nunca?
 Son muchas, provocadas por el propio miedo a perder o a no conseguir lo que queremos.
A veces provocadas por uno mismo, o por tus amigos. Que esa es otra ¿Los amigos no están para lo que necesites? ¿Entonces para que te crean inseguridades? Yo creo que es porque simple y llanamente lo hacen para ser los graciosos, pero en realidad lo que hacen posiblemente es crearte un trauma, no digo que solo porque te digan que quizá el chico que te gusta no va a ir a la cita ya tú automáticamente tengas esa inseguridad, lo que quizá te hace tenerla es cuando el chico no viene, pone una escusa, volvéis a quedar y no aparece, entonces ya piensas que quizá tus amigos tengan razón y tú te empiezas a amargar, y cuando viene un chico maravilloso que te hace ver lo increíble que eres tú no lo crees, porque piensas que lo que le lleva a decir eso son las ganas de jugar con tu corazón, como una vez hace tantos años hicieron.

 Seguramente luego esa persona se harta de estar todo el día escuchando de tu propia boca que no vales nada, y cansada de eso se larga, y claro, te poner a pensar y te das cuenta de que lo que de verdad falla en esta historia eras tú, con tus inseguridades. Desesperadamente empiezas a buscar ayuda, pero no tiene remedio, han calado tan hondo tus inseguridades que no te las puedes quitar. ¿Lo intentas? Por supuesto, pero tienes una recaída tras otra y al final te cansas de tantas recaídas, y mueres pensando que ojalá no hubieras hecho caso a esos amigos, o que quizá no deberías de haber quedado con ese chico que causó todo tu mal estar.
 Por eso yo os digo a todos los que me seguís (seáis mucho o pocos) que las inseguridades, aunque buenas son aveces, demasiadas son un trauma, no permitáis que nadie os las meta en la cabeza, porque luego no podréis ser felices en la vida, mirad la vida con positividad, y si algún día pasa algo parecido como al a historia que acabo de contaros para dar ejemplo pensar que quizá ese chico o chica no merece la pena, la persona que de verdad te quiera, tiene que quererte tal y como eres, y no hacerte pasar nunca por ese trago tan malo que son las inseguridades, es más tiene que ayudarte a superarlas.

 Y sí, lo dice la tía que tiene más inseguridades que neuronas en el cerebro, pero solo para que no cometáis el mismo error que yo, dado que a mí, me es imposible superarlo, porque está en mi naturaleza de cabezona.

Reflexiones...

 Hoy me he dado cuenta, de que mi vida no es tan mal como yo pensaba, tengo amigos maravillosos y gente que me quiere.
¿Qué a veces se meten conmigo? Sí, pero lo hacen para divertirse de vez en cuando. Es más yo también lo hago muchas veces con ellos.
 ¿Qué a veces son pesados e irreflexibles? Sí, pero no por eso los dejo de querer.

Aparte de los amigos que tengo cerca mía, también cuentan los que no están conmigo porque están lejos, ellos son quizá mi bien más preciado, y cuando me enteré de que podría ir a verlos, si las cosas salen bien en mi casa, me puse loca de alegría, tanto ellos (los de lejos) como yo esperamos ese día con ilusión y cariño, yo personalmente (no sé si ellos también) tacho un día más en mi calendario, esos días de menos que faltan se me harán eternos, pero cuando por fin los abrace sabré que la espera ha merecido la pena, mientras tanto solo queda esperar, y soñar, soñar siempre, que es gratis y es quizá la único en esta vida que nos hace felices de verdad.
 Que los días en los que no hablo con ellos, son para mí los peores de mi existencia, por eso cada día que hablo con ellos, y me alegran la noche, mi peor día se puede convertir en el mejor.
 Así que ya sabéis, mis mejores días son solo con ellos 

sábado, 5 de noviembre de 2011

Sinsajo.

—Se lo dijiste a todo el mundo en el Comando — dice Gale—. Fue una de tus condiciones para ser el
Sinsajo. “Yo mataré a Snow”.
Eso parecen dos cosas desconectadas. Negociar con Coin por el privilegio de matar a Snow después
de la guerra y este vuelo no autorizado por el Capitolio.
—Pero no de esta forma —le digo—. Ha sido un completo desastre.
—Creo que sería considerada una misión muy exitosa —dice Gale—. Nos hemos infiltrado en el
campamento enemigo, demostrando que las defensas del Capitolio pueden ser incumplidas. Hemos
logrado obtener imágenes de nosotros mismos en todas las noticias del Capitolio. Hemos llevado a
toda la ciudad al caos intentando encontrarnos.
—Confía en mí, Plutarch estará emocionado —añade Cressida.
—Eso es porque a Plutarch no le importa quién muera —le digo—. No, siempre que sus Juegos sean
un éxito.
Cressida y Gale dan vueltas y vueltas tratando de convencerme. Pollux asiente con la cabeza
respaldando sus palabras. Sólo Peeta no ofrece una opinión.
—¿Qué piensas, Peeta? — le pregunto finalmente.
Kattnis y Gale
—Creo que... todavía no tienes ni idea. Del efecto que puedes tener. —Él desliza sus puños hasta el
apoyo y se empuja a sí mismo a una posición sentada—. Ninguna de las personas que hemos perdido
eran idiotas. Ellos sabían lo que estaban haciendo. Te siguieron porque realmente creían que podrías
matar a Snow.

Sueños.

Los sueños, que cosas tan abstractas, tan difíciles de alcanzar, tan sumamente bonitos o tal vez, tan sumamente desquiciantes, ¿Quién no persigue los sueños hasta volverse loco?
Casi todo el mundo lo hace, algunos se rinden, demasiado pronto, otros... no.
¿Y que es la vida sino un sueño? Un largo sueño, del que no nos despertamos hasta el momento de la muerte, ¿qué como lo sé? fácil es lógica, esta vida es demasiado dura.